WikiLeaks hace pública nueva filtración sobre la guerra de Estados Unidos en Iraq
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22 de octubre de 2010
22 de octubre de 2010
Poco antes de lo previsto, la organización WikiLeaks hizo público los Registros de la Guerra de Iraq, una nueva filtración de 391,892 reportes sobre la guerra que Estados Unidos sostiene en Iraq desde 2004. Como lo hizo con los Diarios de la Guerra Afgana, su anterior filtración, antes de darlos a conocer masivamente los difundió entre algunos de los principales medios de comunicación a nivel mundial. De entre lo destacado en los reportes de las "actividades significativas" (significant activities o SIGACTS, acrónimo en inglés) trasciende como el gobierno de los Estados Unidos no sólo supo de la tortura y vejaciones sufridas por fuerzas iraquíes a civiles, sino que ordenó a las tropas ignorarlas y no investigarlas.
La mar de datos desentraña, directo de los SIGACTS, hechos como la muertes de civiles que se rindieron antes de morir o iraquíes usados como radares para detectar minas antipersonales, entre cientos de acciones más, y al final, una cifra contundente. De un total de 109 mil fallecimientos, 63 por cientos podrían ser civiles, o como son llamados en la jerga militar, "no combatientes". Barack Obama, hasta este sábado, no se había referido oficialmente a los llamados internacionales, como el hecho por la ONU, para explicar el porqué las tropas a su cargo toleraron la impunidad de torturas y ejecuciones que, a la luz de los datos, parecen sistemáticas.
Presunta tolerancia de la tortura
Las crudas estadísticas al ser analizadas ponen al descubierto torturas, asesinatos, vejaciones y ejecuciones sumarias de la policía y el Ejército de Iraq, de las que las tropas estadounidenses estaban enteradas y, presuntamente, tienen la orden superior de no proseguir una investigación. "Debido a que no hay alegato o prueba de la participación (en el hecho) por parte de los Estados Unidos, no se inicia una investigación", refiere un reporte citado por Al Jazeera, en el que después de que las tropas iraquíes golpearon, orinaron y escupieron a un rebelde identificado como DAT 326, detenido en un puesto de control en Tarmiya, al norte de Bagdad. Las tropas estadounidenses habrían dejado sin investigar torturas de soldados iraquíes que presenciaron y reportaron a sus superiores, incluso otro reporte da cuenta de que es un método para obtener información de inteligencia. El cierre de una probable investigación se justificó en cientos de casos, con que las tropas estadounidenses no estaban involucradas.
Caballoloco 18 atacó a milicianos ya rendidos
Otro hecho reseñado por The Guardian señala como fueron acribillados insurgentes, luego de mostrar señas claras de rendición. En 2007, se lee en el reporte E8DE9B9F-E468-B587-E4B332C09FF48BE2, dos rebeldes son detectados por un helicóptero Apache estadounidense, a bordo de un vehículo armados con explosivos y granadas de mortero. Muestran señales de rendición a la aeronave apodada Caballoloco 18 (Crazyhorse 18) -sobrenombre de la que estuvo involucrada en el asesinato de dos periodistas de Reuters- y deciden abrir fuego, ya que según la interpretación del abogado 1/227, los enemigos no pueden rendirse a las aeronaves, por lo que procedieron a actuar, lanzándoles un misil Hellfire.
CRAZYHORSE reports AIF got into a dumptruck headed north, engaged and then they came out wanting to surrender… (Caballo Loco reporta
fuerzas anti iraquíes dentro de un camión de carga con dirección al norte, atacados y luego salieron para querer rendirse)Ambos soldados logran salir del vehículo y corren a una choza a refugiarse. La aeronave recibe la autorización de sus mandos para atacar la choza, que es destruída con sus ocupantes dentro.
Según Claude Bruderlein, director de política humanitaria e investigación de conflictos en la Universidad de Harvard, entrevistado por el Buró de Periodismo de Investigación, los soldados habrían presuntamente violado lo dispuesto por la Convención de Ginebra tras la Segunda Guerra Mundial, no atacar a un enemigo que ya se ha rendido. Según el reporte ambos rebeldes fueron asesinados cuando habían intentado rendirse y habían buscado refugiarse.
Muertes en puntos de control
Dentro de la inmensidad de incidentes reportados, los medios han encontrados tendencias iniciales, así como reportes de muertes civiles que no fueron conocidas por los medios. Otro punto sensible, en le que han ocurrido cientos de muertes inocentes, es en los puntos de control, en los que puede ser letal no atender las órdenes militares o más allá, no comprenderlas, como han atestiguado agónicas las víctimas. Se narra el caso de un marine que, ante el reflejo del sol en el parabrisas de un coche que no se detuvo, acabó disparándole. Dentro, murió una madre y resultaron heridas sus tres hijas y su marido.
La Casa Blanca no ha hecho ningún pronunciamiento al respecto. Hillary Clinton, secretaria de Estado, previamente había condenado las filtraciones que pudieran poner en riesgo a sus tropas y aliados. En el mismo tenor se expresó El Pentágono y el gobierno de Reino Unido. David Lapan, portavóz del Pentágono, dijo que se habían prevenido semanas antes y que en la filtración no hay evidencia de crímenes de guerra. Se mostró preocupado por la credibilidad que los grandes medios pudieran dar a WikiLeaks, y sobretodo, por la integridad de 50 mil tropas de dicho país y aliados que aún permanecen en Iraq. El coronel afirmó que su problema con la organización civil va más allá de la publicación de nombres de personas, ya que puede difundir información que sólo ellos conocen, y que pondría en riesgo intereses estadounidenses.
Reacciones ante la filtración
La ONU, a través de Manfred Nowak, relator especial de la ONU sobre la tortura, pidió a Estados Unidos abrir una investigación luego de lo revelado por WikiLeaks, mientras que Amnistía Internacional expresó en comunicado oficial que dicha nación tiene la obligación de demostrar bajo el derecho internacional de asegurar que la tortura no ha sido usada por sus tropas o sus aliados, ante las evidencias existentes.
Julian Assange, del sitio web WikiLeaks, dijo a CNN que la filtración es una evidencia contundente de crímenes de guerra, y defendió la búsqueda de la verdad, que en su opinión, es la víctima inicial antes, durante y después de un conflicto. "En esta ocasión hemos realizado un enfoque mucho más enérgico que el que realizamos con el material de Afganistán, no porque creyésemos que a aquel enfoque le faltase algo, sino para prevenir distracciones sobre el verdadero contenido por parte de gente que quiere desviar la atención", dijo Assange a la televisora, en una entrevista exclusiva que abandonó, luego de que la conductora del programa insistiera en que declarara sobre acusaciones en Suecia que pesan sobre el activista, quien además denunció haber recibido presiones explícitas de Estados Unidos.
En conferencia de prensa este sábado, Kristinn Hrafnsson, de la organización civil, dijo que se publicarán más informes sobre Afganistán próximamente, ya que la información en su poder sólo ha dado a conocer una sexta parte de la información.
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Noticia relacionada
- «Washington preocupado por publicación de documentos de guerra en WikiLeaks» — Wikinoticias, 16 de octubre, 2010.
Fuentes
- ((en)) Sabrina Taverniese y Andrew W. Lehren “A Grim Portrait of Civilian Deaths in Iraq” — The New York Times, 22 de octubre de 2010.
- ((en)) Gregg Carsltrom “US turned blind eye to torture” — Al Jazeera, 22 de octubre de 2010.
- ((es)) David Leigh “Iraq war logs: Apache crew killed insurgents who tried to surrender” — The Guardian, 22 de octubre de 2010.
- ((en)) Nick Davies, Jonathan Steele y David Leigh “Iraq war logs: secret files show how US ignored torture” — The Guardian, 22 de octubre de 2010.
- ((en)) Angus Stickler “US Apache guns down surrendering insurgents” — The Iraq War Logs, 22 de octubre de 2010.
- ((es)) EFE “Obama guarda silencio ante la masiva filtración de documentos en Wikileaks” — 20minutos.es, 22 de octubre de 2010.
- ((en)) Agencias “El Pentágono alerta del peligro para sus tropas por la nueva filtración de Wikileaks” — 20minutos.es, 22 de octubre de 2010.