Doscientos treinta y dos personas, casi todas universitarios, murieron hoy en Brasil tras desatarse un incendio en una discoteca donde se celebraba una fiesta. La tragedia ocurrió en la localidad de Santa María, en el estado de Río Grande del Sur. Al momento del siniestro, 2000 personas se encontraban dentro de la discoteca.
Un cantante que se encontraba en la tarima encendió una bengala, la cual causó que el aislante acústico del techo se encendiera y causara pánico entre los presentes. Según la investigación preliminar y reportes de los presentes, los guardias de seguridad del local cerraron las puertas y salidas de emergencia para evitar que se fueran sin pagar. Las autoridades reportaron que parte de los fallecidos murieron aplastados por la estampida humana que intentaba escapar del lugar y otra parte por inhalación de humo. Los bomberos tardaron más de tres horas en apagar totalmente el siniestro.
La Presidenta de Brasil canceló su viaje a Chile y declaró entre lágrimas:
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Quien necesita de mí en este momento es el pueblo brasileño. Le pedí a todos los ministros ayudar en todo lo que puedan y trasladarse allá, y yo también estaré allá. En este momento de tristeza estamos juntos y, aunque manteniendo la tristeza, vamos a superarlo.
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