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19 de julio de 2014

Si ya en la jornada anterior Italia causó la primera sorpresa del Campeonato de Europa de hockey sobre patines de Alcobendas, ayer viernes volvieron a ser protagonistas de otro resultado inesperado al derrotar a la selección portuguesa por 2-3, lo cual da un vuelco a la clasificación, ya que Portugal pasó de ser líder en solitario con nueve puntos a estar prácticamente descartada para el título, que con mucha mayor probabilidad será de España, que depende de sí misma, o de Italia, que necesita que España no gane. Por otro lado, Francia pinchó ante una buena Alemania y dice adiós a sus opciones de medalla.

La jornada se inició con este Francia-Alemania, en el cual Francia decepcionó y Alemania mereció la victoria. Los germanos encarrilaron el partido en la primera mitad, con un 0-3 gracias a un doblete de Kevin Karschau y un penalti marcado por Robin Schulz, resultado tras el cual Francia no supo volver a meterse en el partido, a pesar de recortar distancias con un tanto de Wilfried Roux antes del descanso. En la segunda parte, Alemania supo defender el marcador y aún aumentó su ventaja con un gol de Lukas Karschau en los segundos finales. De esta forma, Alemania suma sus primeros tres puntos del campeonato y empata con Francia, contra la que se disputarán el cuarto puesto en la siguiente y última jornada.

El segundo partido fue el que enfrentó a Portugal contra Italia. Fue un encuentro de alta intensidad y buen juego, aunque el primer tanto no llegó hasta pasado el minuto 15, cuando Gonçalo Alves adelantó a Portugal en un contraataque. En el último minuto de la primera parte, Italia dio la vuelta al marcador, primero con un gol de Mattia Cocco en inferioridad numérica de Italia y después con un penalti transformado por Federico Ambrosio.

Una nueva superiodad numérica para Portugal a diez minutos para el final permitió a los lusos empatar de nuevo el encuentro. Sin embargo, un penalti directo lanzado por Mattia Cocco en el minuto 14 del segundo tiempo dio la victoria final a los italianos, que a falta de una jornada mantienen opciones de colgarse la medalla de oro.

En el último partido, España derrotó a Suiza por un contundente 1-13 (Suiza jugó como equipo local, España con su segunda equipación) y no especuló, ya que dada la igualdad de la clasificación la diferencia de goles podría ser determinante en caso de empate a puntos con Italia. Con Jordi Bargalló de nuevo con el equipo después de dos partidos ausente por el fallecimiento de su madre, España dejó cerrado el partido en la primera mitad de juego con un 0-8 al descanso.

En la segunda parte, el capitán suizo Pascal Kissling hizo el gol del honor para los suyos. Por parte de España, destacaron Pedro Gil y Ton Baliu, cada uno con tres tantos, y Jordi Bargalló con cinco asistencias de gol.

El asombroso torneo de Italia ha tumbado las previsiones para el primer y segundo puesto que todo el mundo hacía. Incluso la organización del torneo había dejado para el final el partido España-Portugal previendo que sería el encuentro que decidiría entre ellos quién se alzaría con el trofeo, pero este será entregado más probablemente a España o a Italia.

Si España gana a Portugal, serán por octava vez consecutiva campeones de Europa; si Italia consigue ganar y que España no lo haga, serán ellos los campeones; Portugal, por su parte, necesita que Italia pierda primero ante Francia y ganar luego a España. Fuera ya de las medallas, Francia y Alemania lucharán por el cuarto puesto, aunque a priori a Alemania se le presenta más fácil, ya que el último cruce lo tienen contra Suiza, que ya no se juega nada, mientras que Francia se enfrenta a Italia, que quiere agotar sus opciones de ganar el campeonato.