Esta tarde han tenido lugar los últimos actos de las tres jornadas de huelga convocadas por el sector educativo en España. Las numerosas manifestaciones, que han recorrido una gran cantidad de ciudades del país, han reunido a miles de personas en las calles para rechazar la reforma educativa del ministro José Ignacio Wert, del Partido Popular, conocida como LOMCE, y para protestar con los abultados recortes en educación, que suman ya más de 6.400 millones de euros desde 2010.
En Madrid, donde se ha concentrado el mayor número de personas, la manifestación arrancó pasadas las seis de la tarde y se prolongó varias horas. Las nubes oscuras que se cernían sobre los presentes dejaron caer lluvia durante algunos periodos de la protesta, que sin embargo siguió adelante. Estudiantes, profesores y padres de alumnos venidos tanto de la educación primaria y secundaria como de la universidad han recorrido el trayecto que une la plaza de Cánovas del Castillo, popularmente conocida como plaza de Neptuno, hasta la Puerta del Sol. La marcha, que pasaba por delante del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, se detuvo ahí para pedir la dimisión del ministro Wert. Junto a los asistentes procedentes del mundo educativo han estado además algunos representantes políticos de primera línea, como el coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara, y representantes de los sindicatos mayoritarios, UGT y Comisiones Obreras.
Los organizadores de la marcha se han mostrado muy satisfechos del seguimiento que ha obtenido esta huelga, pues afirman que ha superado a la anterior huelga, que sucedió en mayo y que compartió con esta los mismos objetivos. Una de las razones que aducen para este mayor seguimiento es que ahora hay más gente que conoce la nueva ley, la cual en mayo era tan sólo un anteproyecto.