Muere mexicano tras golpiza de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos

2 de junio de 2010

Anastasio Hernández Rojas, migrante mexicano avecindado en San Diego, California 27 años atrás, murió luego de una golpiza propinada por elementos de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos, en la Garita Internacional de San Ysidro.

Hernández fue detenido el viernes 31 de mayo en San Diego por carecer de estancia legal en la Unión Americana. Fue iniciado el proceso llamado "deportación voluntaria", pero al llegar al cruce con Tijuana, fue golpeado por cerca de 20 agentes hasta dejarlo inconsciente, además de aplicarle toques eléctricos.

Martín Hernández, hermano de la víctima, dijo a la agencia AFP que los agentes lo golpearon a él primero ya esposado y en el suelo, pero al reclamar Anastasio a los agentes, éstos se enojaron más y comenzaron a golpearlo hasta que perdió el conocimiento. Dos días después en un hospital de Chula Vista, California, falleció a los 42 años de edad, por un paro cardiorrespiratorio.

Los agentes justificaron la agresión por una presunta resistencia al arresto, ya que la víctima intentó correr al retirarle las esposas. Testigos de la golpiza dijeron que Hernández ya no se movía y aún así seguía siendo atacado por los policías.

México, a través de su cancillería, condenó el ataque y solicitó al gobierno de Estados Unidos una investigación exhaustiva sobre el hecho, y anunció que apoyará a la familia del migrante jurídicamente para buscar justicia y que los presuntos responsables sean encarcelados.