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El gobierno de Uruguay rechazó el pedido de asilo político del expresidente del Perú Alan García

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Alan García en el 2006.
Tabaré Vázquez en el 2017.

En conferencia de prensa en la sede del Poder Ejecutivo de Uruguay en Montevideo, el lunes 3 de diciembre el presidente de Uruguay Tabaré Vázquez anunció, junto al ministro de Relaciones Exteriores de ese país, Rodolfo Nin Novoa, la decisión en Consejo de Ministros de no acceder al pedido de asilo diplomático solicitado por el expresidente del Perú Alan García amparándose en argumentos jurídicos, quien será invitado a retirarse inmediatamente de la residencia del embajador de Uruguay ante el Perú Carlos Barros en Lima en la que se encuentra desde el 17 de noviembre pasado.

Citando a juristas como Eduardo Jiménez de Aréchaga y Manuel Vieira, Vázquez mencionó que en conjunto con el canciller y el secretario y prosecretario de Presidencia, analizó el informe enviado por el gobierno peruano y los documentos presentados por los abogados y por el propio Alan García. Aclaró asimismo que dejaron de lado las llamadas de organizaciones gubernamentales, dirigentes políticos y medios internacionales.

El presidente Tabaré Vázquez justificó la decisión en consideraciones jurídicas y reafirmó que en el Perú funcionan autónoma y libremente los tres poderes del Estado, y que el Poder Judicial es el que desarrolla las investigaciones de presuntos delitos por los cuales García está siendo investigado.

Rodolfo Nin Novoa explicó que el gobierno uruguayo consideró que las investigaciones judiciales contra el expresidente peruano no constituyen persecución política sino que se tratan de causas vinculadas a hechos económicos y administrativos que tuvieron lugar durante los gobiernos del expresidente, por lo tanto no corresponde el asilo político.

En medio del escándalo de corrupción de la empresa constructora brasileña Oderbrecht por el cual está siendo investigado por presuntos delitos económicos en los que habría recibido un soborno de U$S 100 000 por parte de la constructora, Alan García ingresó en la noche del 17 de noviembre a la residencia diplomática de Uruguay en el Perú para solicitar asilo político en virtud de lo dispuesto por la Convención sobre Asilo Diplomático de Caracas de 1954, alegando persecución política.

Este hecho causó repercusión pública en la sociedad peruana, que motivó protestas en frente de la residencia diplomática y el viaje de congresistas del Frente Amplio del Perú a Montevideo para presionar para que el gobierno uruguayo rechazara el pedido de asilo.

Según informa RPP Noticias, poco después de conocida la resolución que rechaza su pedido, Alan García se retiró de la residencia diplomática esta misma mañana.

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